Satisfacción entre los representantes políticos

Todos los grupos políticos de Fisterra acogieron ayer con gran satisfacción, y ciertas valoraciones, la candidatura del Cabo Fisterra a Patrimonio Europeo. De lograrla (habrá más de un centenar de candidatos de toda Europa), la repercusión social y turística será extraordinaria, pero aunque no se consiguiese, la sola candidatura (cuatro de España) ya sirve de enorme estímulo a la proyección de Fisterra.

El alcalde, José Manuel Traba, fue muy expresivo: «É algo fantástico. Este tipo de cousas, anque non leven aparellados investimentos directos, si dan baza a lograr axudas de UE ou de España para poñer en valor o Cabo. Hai un sector turístico moi importante que se move por este tipo de galardóns».

Se da la circunstancia de que Traba se entrevistó ayer con Felipe Arias, director xeral de Patrimonio. Entre otros temas, hablaron sobre este. Arias señaló que la delimitación del Cabo puede ampliarse a otras zonas de la comarca, pese a que la candidatura oficial del Ministerio es el Cabo de Fisterra, pero Traba no es partidario. En su opinión, el límite debe ser el mismo que, hace dos décadas, se estableció para declararlo bien de interés cultural: hasta el entorno de la iglesia de Santa María das Areas.

Juan Boullosa, del PSOE, cree que se trata de una «situación moi favorable para Fisterra. O PSOE poñerá todo o que falta para chegar a bo porto». Y añadió: «E espero que catro mentes pequenas, locais e comarcais, se decaten de que Fisterra é algo máis que un nome. Que fan falta investimentos e que de Fisterra vivimos todos».

Desidia

Para Xan García, del CDI-Terra Galega, es momento de «autofelicitarse. Isto demostra a importancia que Fisterra ten no mundo, que contrasta coa desidia e o abandono do goberno nese entorno. Na punta, coas obras, estase cometendo un auténtico atentado». No está de acuerdo en «enmascarar» esta candidatura con la fachada atlántica, como se llegó a proponer desde algún sector. «Fisterra é Fisterra, sen máis», señala el concejal.

Manuel Canosa, de Fisterra Unida, dijo estar «contentísimo» con la candidatura del Cabo, especialmente como vecino del municipio. Lamenta que los fisterráns no valoren su propia tierra como se merece, y que cuando llegan buenas noticias como estas, «todo o mundo se sinte fisterrán».

Mónica Góñez, la candidata del BNG, también se alegra: «Beneficia ao municipio e a toda a comarca, e alimenta máis o espíritu e mito de Fisterra. Desde o BNG, e dende a Consellería de Cultura, farase todo o posible para que a candidatura saia adiante e, dende logo, para impulsala».

El alcalde de Vimianzo asegura que los concejales socialistas, y nadie más, decidirán qué hacer

El alcalde de Vimianzo, Alejandro Rodríguez Lema, asegura que solo los concejales socialistas de Vimianzo, y nadie más, decidirá las acciones a adoptar en el Concello.

Rodríguez emitió un amplio comunicado, fraccionado en seis puntos, en el que sale al paso de todos los comentarios y afirmaciones vertidas en los últimos días.

En primer lugar, y como hizo ayer, para negar que haya crisis: «Ninguna crisis política ni institucional existe en el equipo de gobierno del Ayuntamiento de Vimianzo. Los concejales integrados en el PSdeG-PSOE tenemos como premisas básicas la independencia y la libertad y la libertad de ideas y pensamientos, lo que motiva que en determinados momentos, y ante propuestas políticas, unos pensemos de una forma distinta a la que puedan pensar otros, traduciéndose esto en la libertad de voto».

Eso es lo que ha pasado, dice el regidor, en el último pleno, a propósito de la moción popular sobre el plan acuícola, que ha desencadenado la situación.

En segundo lugar, el alcalde explica que esa libertad de voto es una constante mantenida a lo largo de toda la vida política de los socialistas, «sin que ello haya supuesto desavenencias o crisis de gobierno, incluso en ámbitos nacionales», como fue el caso de la ley del aborto o la última regulación de los matrimonios. «Es a los concejales socialistas de Vimianzo -añade Rodríguez, en tercer lugar- a los que corresponde decidir las acciones a adoptar, nunca al partido. Decisiones que siempre se han adoptado, y adoptarán, democráticamente, y en beneficio de los intereses del pueblo de Vimianzo».

En el cuarto punto, el regidor advierte de que no admite que «terceras personas, ajenas al grupo de gobierno y ediles integrados en el PSdeG-PSOE nos digan lo que tenemos que hacer, y menos cuando esas personas, desde sus puestos de responsabilidad política, nunca se han preocupado por los intereses de Vimianzo, ni realizado gestión ni conseguido inversión alguna para este pueblo, en todo el tiempo que llevan representando a la Costa da Morte en el Parlamento».

En penúltimo lugar, el alcalde vimiancés señala que están fuera de lugar las amenazas de expulsión. «En todo caso, tendrá que ser el partido el que, en caso de estar incurso en causa, y según los estatutos, decida. Es paradójico que alguien que durante el proceso de elección de alcalde haya pedido mi cabeza y negociado a mis espaldas pactos de gobierno con otras formaciones políticas, ahora amenace con expulsiones ante pactos políticos inexistentes». No la cita, pero parece claro que se refiere a la parlamentaria socialista Marisol Soneira.

Alejandro Rodríguez, reitera, finalmente, datos ya apuntados en otras ocasiones: lleva más de 30 años militando en el PSOE, «consiguiendo mayorías absolutas en Vimianzo durante más de veinte años, y miles de votos para esta formación política. Los responsables del PSOE en la Costa da Morte deben preocuparse en ganar las elecciones y no desestabilizar gobiernos sólidos», afirma.